Hemos podido constatar con alegría como los colegios de manera solidaria: Directores, Padres de Familia, Docentes y Personal administrativo han logrado dar una "lavadita de cara" a nuestros colegios.
Pese a los problemas económicos en todas las familias, ha surgido el esfuerzo de unos por otros, bajo el amor evangélico de una ayuda y amor al prójimo tanto el pintado, arreglo, repotenciación y buena ambientación.
Cabe destacar el esfuerzo gratuito con el único anhelo de brindar un mejor ambiente en sencillez pero grande en sabor cristiano de nuestras maestras y maestros.
Desde los frontis que testimonian ante la calle el primer rostro de la educación: Limpieza y orden
Aquellas paredes exteriorizan el compromiso de una buena organización y el deseo del progreso.
Los salones internos donde pasaran el mayor tiempo de aprendizaje y ejercicio de los valores cristianos recibieron de manera total la ambientación.
Los Jardínes como la Administración de una mayordomia frente a la naturaleza que Dios nos ha dado desde el Primer Capítulo del Génesis.
Hemos empezado bien, cuidando como si fuese una Flor nuestra dimensión física de nuestras instituciones educativas.